La estatua de la Libertad,
paradójicamente, ni siquiera fue creada en Estados Unidos, sino en
el estudio de un escultor francés llamado Frederic Auguste
Bartholdi. Con el que colaboró Eiffel.
Es una estatua de
cobre, cubierta con una túnica larga y suelta, que se yergue
majestuosamente sobre una pequeñísima isla en el puerto de Nueva
York y le da la bienvenida a los barcos y pasajeros que llegan. En la
mano derecha sostiene una antorcha en alto señalando el cielo; en la
izquierda sostiene una tablilla que dice: "4 de julio de 1776",
fecha en que se proclamó la Declaración de la Independencia.
La estatua, cuyo nombre completo es La Libertad Iluminando el
Mundo, fue un regalo de Francia a Estados Unidos, que simboliza el
amor de ambos países a la democracia.
Una versión mas
pequeña realizada también por Bartholdi, de 36 pies (11 metros) de
altura y esculpida en bronce, se encuentra en uno de los puentes que
cruzan el río Sena en París. La que sirvió de boceto, se
encuentra en los jardines de Luxemburgo de París.
También en Argentina,
concretamente en Buenos Aires, hay una réplica realizada por el
mismo autor, esta vez esculpida en hierro rojo.
Existen réplicas en muchas
ciudades del mundo.